¿Porque estás aqui?

Porque se trata de eso, de bailar en ropa interior un sábado antes de salir para sentirte una súper estrella, de sentirte en un videoclip cuando escuchas música subiendo las escaleras del metro, de no poder evitar un paso de baile cuando escuchas esa estrofa que cambió tu vida a golpe de beat.

Porque se trata de música al fin y al cabo. Pop, electrónica, reinas, clubbing y modernas que lo darán todo en las raves.

Tragadores de la mejor mierda.

Ecos de Extrarradio.

domingo, 17 de febrero de 2013

Justin y la sucesión forzosa


El panorama musical actual nos aburre tan soberanamente que nos vemos obligados a hablar del regreso de Justin. Hasta nos tragamos los Grammys, lo cual supuso una gran moqueada en nuestro sofa.

¿Taylor Swift creyendose Britney? ¿Rihanna no enseñando nada? Que los quemen, por favor.

La cosa es que Justin, después de declarar su primer single, ha seguido bombardeando espumarajos musicales con más o menos acierto, hasta conseguir captar la atención del publico mayoritario.

Y nosotros, que no somos público mayoritario, pero nos da igual, pues vamos a hacer un ejercicio de humildad al hablar del señor Timberlake.

Suit & Tie era poco menos que apestoso. Y esto es así. Es como... volver a repetirte al cuadrado. Es decir, no sólo repetir estética visual, si no hacer una canción sobre lo orgulloso que estás de ello. Nos parece genial que lo haga, y también que la peña se lo haya tragado. Pero con nosotros no ha funcionado.

El lyric video no ayudó, y tampoco lo ha hecho el video. 



Será que ya habiamos sentenciado al muchacho. La noticia de la aparición de Jay Z en la canción hizo que nos fueramos del todo.

Y viendo el video te quedas un poquito frío. Básicamente va de que Justin se pone un traje y da un concierto en el Benidorm Palace.

Hay planos a contraluz como hace veinte años y Jay-Z está como un pulpo en un garaje.

No estamos seguros de donde queda aquel Justin de Rock Your Body, pero creemos que ahí, en alguna parte, o al menos eso nos dicen los movimientos catchy y el pañuelito.

Y si, el final es algo que Kylie ya hizo en Get Out Of My Way. pero no deja de ser resultón.

Y luego ha hecho un par de actuaciones, incluyendo los ya mencionados Grammy, en los que ha demostrado que épocas pasadas fueron mejores, y que la vuelta a las orquestas sólo fue apta para Christina Aguilera.

Pero he aquí la sorpresa. The 20/20 Experience, nombre extremadamente estúpido para un álbum, encierra una joya que dura los mismos minutos que dura el vídeo de Alejandro.



Clasicismo con sentido. Olvidemonos de lo gratuito. Si te pones un traje, que sea para hablar de algo profundo durante más de cinco minutos, sobre una base rompedora y a la vez que mil veces oída.

Es como el hermano mayor de Cry Me A River, después de volver de la universidad.

El final puede que esté completamente fuera de lugar, o puede que sea la transición perfecta para algo. No lo sabemos y no nos importa.

Pero lo cierto es que la canción no se hace larga en absoluto. Es como si quisieras que siguiera un poco más, y la canción simplemente siguiera.

Así que sí, Mirrors ha restaurado nuestra fe en Justin y en su trabajo. Aunque sea de pequeña manera.

Pero como es habitual en elpop, una de cal y otra de arena. Os doy una buena canción y os doy una portada más bien nula.


El blanco y negro, aunque tiene sentido, nos tiene aburridos en él. Las letras con tono dorado son justificables. Pero ¿El visor de dioptrías? ¿Acaso está cegato?

Esto brinda una imagen más bien ridícula y propone problemas de mercado al no reconocérsele en la portada. Lo cual es un error.

Además su nombre no aparece, ciñiéndose sólo a las iniciales, lo cual es un poco arriesgado para alguien que todavía no tiene ése estatus en el show business.

Pero a lo mejor nos equivocamos y sí que tiene el estatus.

Por que siendo su primer single una pifia ha calado como pocos. Por que aún teniendo una carrera más bien escueta, está haciendo muchísimo ruido. Por que está aprovechándose del golpe social de Barney Stinson para no quitarse nunca el tres piezas.

Por que, de repente, es la única persona masculina capaz de salvar el pop.

¿Quiere decir ésto algo?

Puede que The 20/20 Experience esclarezca algunas dudas.

2 comentarios:

  1. Me siento bastante identificado con el artículo. Suit and tie no sólo no me emocionó sino que me pareció un timo. ¿7 años esperando para este coñazo que destila un regusto a clasicismo mal entendido por todos lados? Sin embargo, Mirrors me encanta. Tampoco tiene nada que no hayamos escuchado antes (y más en él que en el fondo todos sus temas se reducen a una variación de 3 melodías), pero nos devuelve las esperanzas de que se pueda aproximar un discazo. Estaremos atentos...

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  2. Mira que me gusta este tipo y su musica pero ahora de va artista clasico y se me hace aburrido!Clasico no es igual a aburrido joder , sino mira a Bruno Mars.
    Suit and Tie me ha ganado con las escuchas (Ademas me encanto el juego con los pañuelos en los Grammys)y bueno mirrors no la he escuchado completa (encerio 8 min ?¿ estaba fumado cuando la hizo)!
    Aun espero ese temazo!
    http://www.youtube.com/watch?v=LeZrsIly1Xo

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