Robyn y la bagatela mágica

¡Robyn está de vuelta!

Robyn, una de las pocas personas en todo el universo que tiene sentido común para la música y que crece con cada trabajo, vuelve para enseñar a las lerdas que intentan vivir de cambiarse pelucas y pegar berridos como se hacen las cosas.

Para ésta nueva era ha creado un nuevo grupo, llamado Robyn & La Bagatelle Magique, que en francés significa "Robyn y la bagatela mágica". Y os decimos ésto porque es importante quesepaís que Robyn sabe lo que es una bagatela. Para los que no tengan la ESO:

Bagatela: Composición musical clásica de carácter ligero y poca duración.

Lana Del Rey, atrapada en el tiempo

Lana Del Rey tiene un problema chungo, chungo. Cuando era nueva y había polémica de si era auténtica o sólo una rica calculadora y oportunista, ella salió ganando, e inauguró un género (La música para cantar mientras duermes) que abrió camino a otros artistas como Lorde. Y la odiamos un poco por ésto.

De hecho, ella es la máxima culpable de que esté de moda hacer caso a aburridas del nivel de Sam Smith o de que el indie sea aún considerado trascendental.

Y también es la culpable de que las niñatas vayan a los festivales de música de dormidas con coronas de flores en el pelo. Pero cuánto te odiamos por todo ésto, Lana.

No hablamos de ella sólo para repasar toda su herencia negativa, si no porque hemos conocido uno de los temas de su nuevo álbum, de hecho, el track 01 de su nuevo álbum.

¿Será Ariana Grande una diva de verdad?

Sabeís que sempre las hemos odiado, sabeís que también la odiamos por que robó Problem a Iggy Azalea, aunque ahora odiamos más a Iggy. La odiamos por ser pava por cantar siempre en octavas que sólo algunos gatos pueden percibir y no cambiar nunca de peluca.

Su gira (Sí, al parecer no todas cancelan su gira por falta de ventas) es un poco un rollo, abre con Bang Bang que es lo peor que se le ha hecho a la música desde Timbaland y se dedica a GRITAR durante una hora y cuarto mientras sube y baja de objetos que la elevan por el techo.

Su álbum, My Everything, también es una mierda a medias, con algunas cosas guays, pero con una falta de coherencia y ambición terribles.

Pero puede que todo ésto haya cambiado y ahora la querramos porque aunque sea tonta... ¡Está loca!

El de cuando las travestis hacían música guay

Os vamos a contar una historia. Una historia triste, pero llena de brillantina, pestañas postizas y pintalabios. Las drag queens, hombres que se ponían (¡Se ponen!) una peluca y un vestido de lentejuelas para ganarse la vida creyendose Whitney Houston delante de trece personas, han dejado de ser motivo de burla, y ahora se las toma muy en serio.

Parte de la culpa (el 98% o así) la tiene un reality que, sin exagerar, es quizás el mejor reality que se ha hecho nunca. RuPaul´s Drag Race, un concurso donde una docena de travestis compiten en una serie de pruebas maravillosas para que cada capítulo una gane y las dos peores terminen haciendo playback al son de una canción de diva pop para ver quien se va a la calle.

Si no lo veís, DEBEÍS buscarlo, haceros adictos y sufrir porque sólo ocurra una vez al año.

Y os direís, ¿Se ha convertido esto en un blog de variedades? ¿Qué coño tiene que ver esto con la música?

Pues mogollón.

Y no porque de vez en cuando RuPaul de en el clavo y saque algo que merece la pena, si no porque de un día para otro, las drags han dejado de cantar sobre chorradas para ponerse serias por la música.

Carly Rae Jepsen, ¿Emociona?

No vamos a negarlo. Ésta chica nos ha dado con éste trabajo más pereza que ninguna otra. Y eso que mira que hay gente que nos da pereza. Ya dijimos todo lo que dijimos a cerca de la transición desde Kiss cuando oímos I Really Like You, y ya la pusimos de vuelta y medio cuando intentó colarnos cosas súper intensa y auténtica en una canción que nunca ha sido, no es y desde luego jamás será suya.

De modo que resumiendo:

1) Ella quiere ser artista, como Rihanna, y colaborar con negros, y cantar sobre la brecha económica entre la clase media y la baja y hacer vídeos sobre secuestros.

2) Pero a la vez, quiere vender.

Pues bien, ninguna de las dos es buena. Lo bueno es que hubiera cogido lo bueno que tenía Kiss y lo hubiera pasado por el filtro 2015, para hacer algo como 1989 de Taylor (cosa que en parte ha hecho) o como la Hilary, que se ha venido muy arriba con su comeback.

Pero en lugar de eso, nos brinda este Emotion, que nos emociona, seamos sinceros, mucho menos de lo que esperábamos.

Hilary Duff y la metomorfosis definitiva

Las chicas Disney llevan siempre el estigma de "estrella prefabricada" escrito en la frente. Nunca le importó a nadie que Britney fuera plástica, pero lo cierto es que la mayoría -de hecho diríamos que Britney es la única que sigue siendo prefabricada- tiende a reventar en una explosión de puterío y falso carisma para desprenderse del halo de niña buena.

Hilary Duff nunca se transformó en puta, tan sólo desapareció, dejando tras de sí un rastro de cinco álbumes de los cuales -atentos- dos son recopilatorios.

No contenta con tener una discografía tan diversa como la de Whigfield, Hilary también se sintió un día con ganas de destrozar un clásico electro - rock de crítica religiosa para convertirlo en un canto al puterío.

Rihanna se cree Tarantino, pero para bien

Hay dos maneras de enfrentarse a la promoción de un single: Ir a muerte o pasar de todo. Ir a muerte significa hacer un vídeo que cambie la historia del universo, unas actuaciones más buenas que la droga y conceder un precedente histórico para que otras intenten emularte.

En este proceso, muchas veces la artista, o en su defecto quienquiera que le lleve la dirección comercial y artística, mete la pata creyendo hacer un vídeo guay cuando en realidad sólo es un cúmulo de gifs que duraran en tumblr dos semanas.

Pero a veces, el vídeo es todo un despliege de guión y estimulos visuales, que harán que te encante la canción, aunque en un principio te haya parecido una mierda como una casa poco sinmás.

Bitch Better Have My Money nunca nos entusiasmó, aunque pertenece a uno de los géneros que a Rihanna le quedan mejor: El hip hop choni y pseudobarriobajero. Los otros dos son los sonidos tropicales y las producciones machaconas.

Alexandra Burke se cree Alicia Keys

Pero como si fuera hace quince años. Por lo menos.

Nunca deberíamos de haber depositado demasiadas esperanzas en Alexandra por varias cosas.

1) Su nombre es Alexandra. Parece una chorrada, pero no lo es. La gente con nombres tan folklóricos como Alexandra, Rita o Fulgencia debería tener prohibido ser estrella del pop.

2) Se hizo famosa en un reality show. Y normalmente esa gente suele tener carreras cortas y nada interesantes. Más que nada porque no suelen tener carisma y porque el control sobre su carrera es nulo.

3) Su single presentación fue una cover. Y si existe algo más cutre que baje Cher y lo vea.

Hace meses sacó un EP llamado Renegade que daría las pinceladas de lo que pretendía a partir de ahora. Y cosas de la vida, resultó ser un poquito una caca.