¿Porque estás aqui?

Porque se trata de eso, de bailar en ropa interior un sábado antes de salir para sentirte una súper estrella, de sentirte en un videoclip cuando escuchas música subiendo las escaleras del metro, de no poder evitar un paso de baile cuando escuchas esa estrofa que cambió tu vida a golpe de beat.

Porque se trata de música al fin y al cabo. Pop, electrónica, reinas, clubbing y modernas que lo darán todo en las raves.

Tragadores de la mejor mierda.

Ecos de Extrarradio.

lunes, 14 de enero de 2013

El R&B ya no mola


Corría el 2006 y el mundo musical mainstream estaba en una especie de limbo moral. Habíamos salido de los 90 hacía ya tiempo y nos encontrábamos perdidos.

Hacía poco que Madonna nos había vuelto maricas discotequeras, y ahora no sabíamos muy bien que hacer.

Perdidos, no nos atrevíamos a ir de electrónicas, por que todavía era demasiado indie y desaliñado, aunque ya fingíamos conocer los main mixes de Guetta. Luego nos arrepentiríamos, por supuesto.

Y en ésa vorágine nihilista se nos presentó una cultura hasta ahora desconocida: La cultura negra de guetto, que por varios años nos instó a creernos duros.

Lo baggy molaba, llevábamos oro y nos hacíamos llamar niggas. Aunque los del locutorio nos mirran mal al hacerlo.

Nelly furtado, que hasta entonces había estado volcada en la agroalimentación ecológica, tuvo un golpe de suerte y nos sorprendió a todos, batuteada por ése señor llamado Timbaland, o Timbo Timbales, como nos gusta llamarlo.

Say It Right o Promiscuous de Loose marcaron un estilo, una dureza. dejaban su sello de beat pegajoso y poco entusiasta allá por donde pasaran. Aunque para nosotros el jackpot fue, sin duda, Maneater.



Esta canadiense con nombre de cabra montesa se marcó una salida por la ciudad con una historia de lo más ridicula, donde ella perdía a su perro y se internaba en una de esas maravillosas fiestas subterraneas para que la flagelaran. Si, somos conscientes de cuanto os gusta Christian Grey. A nosotros no nos cae bien.

Se hizo una canción más Britney que la propia Britney, con un estribillo eléctrico y una outro que jamás se repetiría.

Y así, muchos cayeron en el engaño y siguen creyendo que Nelly es una gran artista pop. Más tarde, el tiempo dejaría a cada uno en su lugar. No una, si no varias veces.

Paralelamente, Timbo Timbales, cansado de ir siempre después de la palabra Feat. y de ser relegado a los créditos de producción se dijo que quería un álbum para si mismo, y creo Shock Value, que luego degeneraría en una segunda parte llena de mierda, años más tarde.

Pero Shock Value, en sí, era casi perfecto. The Wai I Are, Give It To Me y Aplogize fueron los reyes de un año en el que el calzoncillo se llevaba por los sobacos, y no eras nadie si no pasabas droga.

Las colaboraciones de éste álbum fueron mastodónticas e inició la absurda moda de los productores de música a sacar álbumes ellos solos. Por esto, entre otras cosas, siempre lo odiaremos.

Pero el amo y señor de la elegancia y el saber estar aquel fatídico año fue el señor Justin Timberlake.

Con Cry Me A River, dedicada a Brtney, ya se demostró que Timbaland era un señor todoterreno, no solo por su perímetro de barriga, si no por su talento.

Pero con Future Sex/Love Sounds Justin demostró que no sólo podía tener algún que otro hit. Demostró que podía ser conceptual. Grande. Demostró que sabía bailar. Y todo con un traje negro.

El concepto del zorreo y del lenguaje gangsta llevado a la más absoluta frialdad. Sexismo justificado. Sexo disxreto.

Genialidad.

Genialidad que se condensó en éste momento.



Y nunca más se volvió a saber de él.

Justin desapareció después de ésta época dorada pra dedicarse a grabar películas chorras.


Ahora, en 2013, todo es diferente. La única artista que ha aguantado sin pasarse descaradamente a la electrónica es Beyoncé, y el R&B se asocia al oro barato y al maltrato.

Sin embargo, él, el que una vez fue señor de la música, aunque sea por un año, vuelve, con el mismo traje, convencido.



Y nos atrevemos a vaticinar que, esta vez, no va a colar. Por que Justin podía haberse reinventado. Pero  no lo ha hecho, ha vuelto a Timbaland.

Y la ha cagado profundamente, por que su supuesto hit suena a rancio y a música de hace cinco años. Es funky, es classy, pero no será lo que escuchemos en las próximas semanas.

Puede que el álbum depare cosas diferentes, o puede que no. Pero si quiere volver de verdad debería de prestar atención al mundo que le rodea, y no caer más veces en el mismo error.

Cuando Chris Brown sacó Fortune todos nos lo creímos. Y no pasó nada.

En otro orden de cosas, también hemos escuchado Nuclear. Y no, tampoco nos gusta.



En fin, será que el R&B ya no mola.

Para terminar, queremos romper una lanza a favor de Danja, ése productor que parió la mitad de aquellos temazos con Timbaland.

A Danja lo amamos incondicionalmente. Estamos seguros de que todo el talento es de él y Timbaland sólo arruinaba las cosas. ¡Viva Danja!

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A ver, él se refiere a que el R&B ya no tiene el éxito comercial de antes. No a los gustos personales. -.-"

      Eliminar