Siguiendo la estela anti- MTV VMA que tanto tienen que enarbolar, los Brit Awards consiguen escenificar aquello que los Grammy siempre han querido ser y nunca han podido.
- Tienen actuaciones británico - culturetas. ¡No podría ser de otra manera!
- Premian a la gente con un CIERTO SENTIDO de la calidad. Recordad que estamos en Inglaterra, donde el rap nunca ha existido y Your Disco Needs You y Wheel Of Fortune cierran las discotecas en ese orden, en lugar de algún tema pseudorockero trasnochado.
- Es la unica entrega de premios que pasa totalmente del culo de Taylor Swift.
- Cuando la gente ve la gala se aburre igual que con cualquier otra, pero con un poquito más de sonrisa porque está feo decir que los Brits fueron aburridos.
Además tuvieron el placer de contar con Kylie, lo cual sólo engrandece su posición de única entrega de premios digna.
No nos interesan nada los premios que ganaron los One Direction, así que pasaremos a recalcar las actuaciones. Excepto la de Käty Patra, que se merece un tendido a parte.
Beyoncé amenaza con provocar epilepsia
La también llamada jefa del marketing contemporáneoapareció en la gala vestida como Whitney Houston antes de que viviera entre basuras para ofrecernos una presentación algo rara de ése cover de Rose Colored Glasses al que ella ha decidido llamar XO.
Inciso: Nunca es tarde para reivindicar Rose Colored Glasses.
Beyoncé se dedica a cantar mientras unas telas al rededor de ella van ofreciendo un espectaculo visual al nivel de cualquier espectáculo pirotécnico de unas fiestas patronales.
Una lección de brilli - brilli que de seguro ha provocado más de un ataque epiléptico.
Recordamos a todos los fans de la mafiosa más famosa que aún no se ha hecho ninguna actuación decente ni en entregas de premios ni en su Mrs. Carter Tour.
Pharrell deja claro que se viste a oscuras
Y que sin Daft Punk pierde prácticamente todo el encanto. El culpable de que Robin Thicke haya sonado en algún lado, quiere que los pantalones pirata vuelvan con más fuerza que nunca, y apoya los estilismos quiméricos.
Get Lucky es guay. Ya nos ha quedado claro. Y todos sabemos que vas a sacar un álbum, Pharrell. Nos hizo gracia que sacaras aquel vídeo con un montón de horas cantando Happy en bucle. Se lo enseñamos a nuestros amigos.
"Vaya... Que guay, ¿No?" Nos dijeron. Pero la verdad es que fue un poquito mierdita la actuación. Lo que nos gusta a nosotros unos robots en un estudio iluminado con leds.
Lorde se empeña en gustarnos colaborando con gente guay
La actuación definitiva debería de haber sido con Chvrches y Charli XCX. Donde Lorde aparece callada. Sentada. A 137 kilómetros de distancia.
Disclosure, o como nos gusta decir Disclashioar, se vendieron sin ningún sentido cuando se lanzaron a firmar el acuerdo que les imponía ésta performance. Lorde no es santo de nuestra devoción. Porque Lana Del Rey es más guapa, más operada y no parece que le está dando un vahido cada vez que canta.
Y nos da mucha pena que Lorde quite el protagonismo a Disclashioar y a Aluna George. Así que imaginemos por un segundo que la performance fue sólo así.
Bastille y Rudimental también se unen por un bien común
Otra puesta en escena de matrimonio extraño, mucho más efectivo que el anterior. La integridad sonora de Bad Blood no puede ponerse en duda, así que Bastille y su onehitwonderismo con Pompeii tienen nuestra aprobación.
Mucho más divertida es la segunda canción, con intervención del negro random de turno que nunca puede dejar de aparecer, que nos presenta una canción enérgetica que es puro baile cantada por la genial Ella Eyre.
Pero no deja de tener todo un ligero tufillo a intensa. ¿Verdad?
Ellie Goulding está atrapada en 2013
Porque no se ha enterado de que tiene single nuevo y tres canciones no singles lo suficientemente buenas como para hacer un mash up decente.
Ella va a su ritmo, presentando I Need Your Love versión acústica y siguiendo con Burn, que sí, que es guay y eso, pero no deja de ser muy cantable y ya.
¿Donde coño te metes You, My Everything? En fin.
Eso sí, todo muy bien cabntado y con una puesta escena de lo más solvente.
Los Brits así pues no dejan de ser un paseo por el escaparate de cómo se deben hacer las cosas. Sin invitar a Taylor Swift, ni dejar que cualquier negro interrumpa ningún discurso. Eso sí, se hecha de menos alguna que otra mamarrachada graciosa, las caras de asco de Rihanna medio emporrada y algún gaga que se salga de lo políticamente correcto.
Correctos. Y ya.
Y sí, sabemos que nos hemos saltado a Katy Perry. Porque a ella le espera una paliza verbal a parte. Pero también nos hemos saltado a Arctic Monkeys y no decís nada por eso, así que tened paciencia.
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