Por no decir que se cree Britney Spears.
Justin Bieber era una lesbiana con suerte que se cortaba el pelo metiendolo en un tazón de tallarines que un día decidió dedicarse en serio a la música.
Ese día fue 2012. Porque todo lo que hizo antes era un poco una mierda. Baby es la peor canción del universo y ni My World, ni My World 2.0 ni My Worlds Acoustic (Sus primeros tres trabajos se llaman así de verdad, no nos lo estamos inventando) tenían nada que mereciera la pena.
Bueno, sólo una cosa. Una cosa que ha salvado a Justin de la quema más veces de lo que él mismo jamás admitirá: Un fenoméno fan como no se había visto, por lo menos, desde las Spice Girls o los Backstreet Boys. De hecho tiene incluso su propia Chris Crocker, en versión chica hetero obsesa.
Pues anda que éste vídeo no trajo cola ni nada. "Porque sus letras hablan del amor, y de los niños de África y eso... ¿Vale?" Una delicia, vaya.
La cosa es que el fenómeno loco de los fans de Justin Bieber ha mantenido a flote el barco hiciera lo que hiciera. En 2012, Justin se quiso poner serio por la música y a la vez bajó a los infiernos a drogarse y a ser guay y a tener problemas con la justicia. Pero vayamos por partes.
Para Believe se corto el pelo y quiso dar una imagen menos patética, y consiguió hacer tres canciones muy guays: As Long As You Love Me, The Beauty And The Beat y Boyfriend. Y además bailaba.
Y también practicaba lo de tener actitud, que por aquella época todavía le salía a medias.
Bueno, en resumidas cuentas, que lo intentó y le salió bien. Más o menos. Entre tanto, se hizo un Britney circa 2007 (Y ya van nosecuantas coincidencias) y tuvo un mal viaje donde, atención:
- Fue arrestado por asalto y conducción temeraria y condenado a dos años en libertad condicional.
- Se drogó.
- Fue expulsado de un hotel por hacer el gamba.
- Tiró huevos a un vecino (¿?)
- Se desmayó en directo.
- Se volvió a drogar.
- Fue expulsado de Coachella.
- Como Lady GaGa, vomitó en directo.
Y todo ésto combinado con un momento mediático nefasto de críticas destructivas y conciertos semi vacíos. Pero ahora, de repente, ha debido de mirar atrás y sentir que su antiguo yo poco o nada tiene que ver con su nuevo yo, porque se enfila claramente como uno de los pocos aspirantes masculinos a estrella del pop.
¡Eso es! Se ha teñido de rubio. Lo que todos sabemos que es, junto a putificarse y ha cantar en español, uno de los pasos más imortantes para terminar siendo una estrella del pop legendaria. Y no sólo eso, si no que volverá éste año, con un trabajo llamado Purpose.
Purpose: noun
1. The reason for which something exists or is done, made, used, etc.
2. An intended or desired result; end; aim; goal.
3. Determination; resoluteness.
4. The subject in hand; the point at issue.
5. Practical result, effect, or advantage.
Vamos, que se viene de mística, de post-rehab, de intensa y de trabajadora. Y prueba de ello son las dos canciones que nos ha dejado durante el verano.
Skrillex and Diplo - Where Are Ü Now Feat. Justin Bieber
En él Justin se convierte en una obra de arte donada por Diplo y Skrillex donde pone cara de triste y baila como si fuera Chris Brown, pero peor. La canción está bien, aunque suene a copia barata de Lean On, y definitivamente ha sido una de las canciones que han taladrado nuestros tímpanos en la época estival.
Atención a lo cutre que es el baile cuando lo hace él, sabiendo que cualquier otro hubiera hecho FUEGO llevando esos movimientos aeróbicos a su terreno.
Y sabemos que está bien porque Florence + The Machine le han hecho una versión.
Justin Bieber - What Do You Mean?
Que es el primer single de verdad del nuevo álbum, con una iluminación inspirada en el fragmento de Bang Bang donde sale Ariana Grande. La canción es como si Diplo hubiese hecho una cover de Clean Bandit y hubiera sido cantada por Bieber, pero con una melodía pausada que deja respirar a la producción.
En pocas palabras: Es guay.
El vídeo es una chorrada, y además supuestamente tiene sentido, pero lo que está claro es que nunca se superará que el rollo skate - graffiti - underground se haya pasado de moda, y que siempre será guay hacer algo conceptual que al final sea una gran gilipollez.
Y también sabemos que es buena porque Chvrches le han hecho una versión.
Así que sí, parece que Justin Bieber vuelve con ganas de currarselo ésta vez, porque está muy arrepentido de haber sido el niño malo. Y recordemos que de momento ya ha salido en un vídeo de Carly Rae Jepsen, lo cual nos parece un comienzo emocionante.
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