A veces, tu vida se vuelve un completo bucle de idas y venidas a antros oscuros donde el estrobo funciona inintermitentemente.
Y de vez en cuando, lo haces en soledad. No porque lo hagas en soledad desde el principio, porque no somos drogadictos cuarentones, pero te quedas colgado de aquí o de allá, o simplemente tus amigos y tu cogeís líneas distintas del metro para volver a vuestras respectivas casas.
En esos momentos, a veces, tienes un reproductor, un móvil o un iPhone (Porque al parecer los usuarios de iPhone nunca, pero NUNCA lo llamarán móvil) y unos auriculares.
Y en esos momentos, no te vale escuchar cualquier cosa.
Te pesan los pies, te hueles raro y vas caminando despacio, deseando haber sacado las gafas de sol. Porque aunque sea invierno y sólo sean las doce de la mañana, el astro diurno golpea enérgicamente tu hebria cabeza.
Y no te apetece escuchar canciones que te inciten a beber y a zorrear, porque ya lo has hecho. Ni tampoco sensiblerías, más que nada porque en tu estado de pre-resaca emocional puedes lanzarte a llorar en cualquier momento.
Lo que te apetece son canciones no demasiado lentas, pero tampoco demasiado tristes aunque deben tener ese toque melancólico. Vuelves de fiesta. No es un momento alegre.
Os presentamos diez canciones que han demostrado ser efectivas acompañando al biandante alcoholizado durante ésta peregrinación autodestructiva, primero para comer y luego para dormir.
10. Kelis - Emancipate
Puede que sea un pcoo forzada y con demasiado bombo para ser la hora que es, pero nunca subestimeís el poder de la sugestión. Con el discursito inicial, ésta canción os hará creer que vuestra caminata no termina en el Burger King o en el banco de cualquier parque, si no que por el camino encontrareís el amor, lo cual, pues oye, siempre está bien.
Además en los versos te ayuda a eximirte de todas las gilipolleces que hayas cometido de dos a seis bajo los efectos de psicotrópicos varios. Lo cual te da fuerza para seguir, porque te hace creer que aún te queda dignidad.
Pero la parte con la que te sientes identificado al 100% es el puente, donde clama que debes volver a levantarte de nuevo como el fénix desde las cenizas o el sol lejos en la distancia, aunque estés hecho mierda. Y es todo lo que necesitas en ese momento. Que pena que sólo repita el puente dos veces y el título de la canción unas 87687.Y además termina con un piano y unos golpes bien gordos. Para que te acuerdes de que la vida es una de cal y otra de arena.
9. Ke$ha – Dancing With Tears In My Eyes
Era inevitable encontrar una canción de Ke$ha en ésta lista, aunque ella ahora no escriba su nombre son la "$" y vaya de reformada y de seria por la vida.
Podríamos haber cogido Hungover, o incluso The Harold Song, pero sin duda, la más crítitca y la que te da ahí, en el pecho cuando vas andando por esas calles llenas de gente decente con hijos por la mañana es ésta.
Porque hace referencias a la resaca emocional. Porque hace referencias a ser un zombi. Y porque mientras andas no haces nada más que sentirte completamente como dice la canción. Aunque no llores ni estés bailando.
8. Marina And The Diamonds – Teen Idle
Todo Electra Heart está construido con melodías melancólicas que podrían valer, pero Teen Idle es demasiado de volver de fiesta como para ignorarla. Podríamos reivindicar I'm A Ruin también, pero nos da que está demasiado fresca aún como para entrar en cualquier lista random de éstas que hacemos.
Teen Idle va mucho con ese momento tan adolescente y con sentirte muy, pero que muy "Suicidal", más que nada porque cada paso que das hacía tu cama es un pequeño suplicio.
Además ese sentimiento de necesidad de que te dejen en paz se acrecenta con en sol y la deshidratación cerebral. Aunque sabemos que la canción aspira a ser más que una canción para volver sólo de fiesta a casa, no se puede negar que parece un poquitín pensada para ésto.
7. Gossip – Love In A Foreign Place
La principal culpable de que hayamos incluido cualquier canción en ésta lista es la letra, que casi siempre evoca a andar sólo al día siguiente con demasiadas sustancias poco morales en la sangre.
I put my make up on and
Head for the other side of town
With my dress from the night before
Fading the countdown
Head for the other side of town
With my dress from the night before
Fading the countdown
Éstas letras son las que más fuerte te pegan, aunque la canción no va exactamente sobre andar de pasadón si no de enamorarte en un país ajeno. Que más da, nos agenciamos ésta licencia literaria. Es lo que tiene la metáfora, que se puede interpretar.
Looking down to ancient buildings
Looking down on me, towering above
Looking down on me, towering above
Además el sintetizador de después del puente te viene de perlas para apretar el paso si te estás meando o muriendo de hambre.
6. Donkeyboy – City Boy
Para cuando en lugar de volver de un concierto de rockeras indies vuelves de una noche de mariconeo. Porque el pop electrónico puede no ser machacón, marcar el paso y además clavarte ese estribillo tan maravilloso que hace que te creas que debajo de esa masa de suciedad y olor a tequila hay una persona que merece la pena. Pues no chiqui. Hoy no.
Además, por si habías hecho algo de lo que te podrías arrepentir, ésta canción te lo recuerda ya: "I don´t wanna be that city boy, running timeless streets again".
Vamos, el "Ésta es la última vez que bebo" de 2015.
5. Madonna - Skin
Ésta te vale para dos cosas:
1. Cuando has ligado pero has vuelto a pirarte sin culminar y te vuelves muy intensa y nihilista, pregúntandote porque no te quiere nadie.
2. Cuando te vas porque te sientes asoladoramente incomprendida, sea cual sea la razón.
Que en un álbum sobre misticismo y plenitud espiritual haya una canción de hace 17 (!) años que hoy día sea para volver de pasadón a casa es simplemente magistral. Acompaña perfectamente esa sensación de que a pesar de que te lo has pasado muy bien vuelves vacío a casa, y en el estribillo te acuerdas del ridículo que has hecho hace tres horas al son de Don Omar con esa persona que al rato quieres y al rato odias.
Maravilloso.
4. Fangoria - Hombres
Otra que pega directamente con ese sentimiento que te entra cuando te han traicionado. De repente, cada vez que se menciona una característica de ese señor imaginario sientes que va acorde con lo que te acaba de pasar.
Y si ha habido movida de índole afectivo - sexual ni te cuento las similitudes que vas a sacar entre el estribillo y lo que te acaba de pasar mientras el láser golpeaba tus retinas. Pero sobre todo, la amarás en éste instante de soledad aumentada y oscilado equilibrio de apéndices por una frase, que podría repetirse ad eternum y seguiría siendo igual de estupenda.
Hoy hay luna llena, y un hombre camina por ella
3. Robyn – Dancing On My Own
La inevitable, la ídola. La mujer que inventó hacer canciones de historias de amor donde el protagonista sale perdiendo pero aún así se pide otro cubata. Porque estar sólo no implica estar sobrio, y por ende, triste.
Puede que Dancing On My Own no parezca en un principio una canción muy dispuesta a acompañarte en tu vuelta a casa por aquello del "bailando", pero su rtimo regular y ese puente en el que las luces se encienden y ter vas porque estás SOLA no tienen precio.
Si alguna vez en alguna universidad estudian el porqué del pop, Dancing On My Own debería ser una asignatura troncal y llave. Porque tiene, es y hace de todo. Todo para bailar, para llorar y sobre todo para volver a casa.
2. ZHU – Faded
La canción más electrónica del elenco se lleva la medalla de plata sólo porque hay una canción que parece que ha sido directamente pensada para ésto. Pero es muy dificil encontrar más satisfacción en esos momentos en algún lado que no sean en ese sintetizador y en esas frases tan sumamente flotantes.
Porque flotar es lo que haces cuando escuchas ésta canción. Bueno a ver, en realidad el EP entero apesta a supra modernidad. El nombre, The Nightday, resume una filosofía de vida que llevamos a cabo mucho más de lo que a nuestro hígado le gustaría.
Y eso de que te compras el EP y en las etiquetas ID3 vienen con un punto al final de cada título. Y cada canción tiene una imagen como carátula, a cada cual mejor. Y las seis canciones son geniales. Y eso. Pero lo que se te clava en el lóbulo frontal es el estribillo, que como en toda canción que se precie es repetido hasta que no puedes dejar de tararearlo.
Baby I'm wasted
All I wanna do is drive home to you
Baby I'm faded
All I wanna do is take you downtown
All I wanna do is drive home to you
Baby I'm faded
All I wanna do is take you downtown
Fabulosamente resacoso.
1. Scissor Sisters – Only The Horses
Sin ninguna duda.
Según creemos Only The Horses es mucho más un himno de cacería discotequil en su planteamiento, pero se ha destapado como la genuina canción de regreso al hogar después de una noche y una mañana llenas de sudor y de momentos escabrosos.
Only The Horses, producida por el ahora infame Calvin Harris, es una canción triste, melancólica y taciturna. Casi se desenvuelve como una persecución entre tu y tu espíritu, creciendo en agonía mientras aumenta la estructura de la canción convirtiéndose en una vuelta a casa, porque ésta noche sólo los caballos te pueden devolver a casa.
Los gritos y el sintetizador no dan tregua, y la revolución sonora te alcanza meintras las referencias a la ciudad que te rodea se rinde ante las referencias a la luz de la mañana y del final del mundo.
Sólo Scissor Sisters serían capaz de entendernos tanto en ésta hora tan mala.
Y así termina la creación de ésta playlist, que si nos haceís caso os brindará mucha ayuda psicológica en esas situaciones en las que te quieres morir. Para luego volver a repetilo el próximo fin de semana, por supuesto.
Gracias por poner banda sonora a un sentimiento que tod@s hemos tenido... Genial post!
ResponderEliminarGracias por poner banda sonora a un sentimiento que tod@s hemos tenido... Genial post!
ResponderEliminarDe nada dos veces.
Eliminar¡Gracias por leernos! (Y comentarnos por duplicado)
Muy bueno el entrar y leer algo de Fangoria en su blog (aunque no sea lo principal de la entrada), y buen trabajo con la lista :)
ResponderEliminar¡Gracias!
Eliminar